Lecturas, ríos de tinta (hoy en día ríos de "bits"), preguntas, metáforas, etc. y solo vamos dando vuelta para encontrar fuera lo que no nos atrevemos a mirar dentro. Todo cuanto existe, solo existe dentro de mí; solo se concibe desde mi interior tal y como lo he deseado y diseñado, creando un programa específico para cada situación.
Para operar programas que consideramos similares, creamos unos “drivers” que son los condicionamientos, entre los más conocidos están los “tópicos”, que nos hacen generalizar (cobarde herramienta del sistema), para no “discriminar” y encontrar las particularidades, el enunciado pareciera ser- “para qué mirar a cada individuo y respetarle si puedo meterles a todo en el mismo saco”.
Blancos, flacos, negros, gordos, extranjeros, locales, todos son tópicos, que en un “consciente” cuadriculado, se encajan perfectamente en esos tópicos que hemos ejecutado en nuestro programa.
Por eso agradezco tanto a los libros por una sola razón especial: No es porque lo que digan sea todo cierto, ni falso, incluso hay absolutas confusiones de sus humanos autores, pero nos ayudan siempre a despertar esa verdad que duerme dentro de cada uno de nosotros… dentro de mí duerme toda la verdad sobre la existencia… solo dentro de mí.
Puedo llegar a ella a través de la meditación, del análisis, del silencio, de las lecturas, de lo que sea, lo que yo elija como más propicio; siempre que sencillamente desee seguir más allá de la respuesta.
Por eso siempre digo, que analizándonos internamente cada uno, puedo prometer que se llega a las mismas conclusiones que están ahí y allá escritas, porque toda esa información está dentro de nosotros, es como si un magnetismo emocional o una resonancia vibracional nos mantiene siempre conectados, no podemos estar de otra forma; de hecho, si consigues a alguien que logre estar desconectado, avísame que le capturaremos y le pondremos en una exposición como especie protegida, porque será el único ejemplar, digno de admiración por su falta de conocimiento de “sí mismo”.
Dentro de mi vive… lo que yo quiera…
Nos vemos en la luz ;-)
Para operar programas que consideramos similares, creamos unos “drivers” que son los condicionamientos, entre los más conocidos están los “tópicos”, que nos hacen generalizar (cobarde herramienta del sistema), para no “discriminar” y encontrar las particularidades, el enunciado pareciera ser- “para qué mirar a cada individuo y respetarle si puedo meterles a todo en el mismo saco”.
Blancos, flacos, negros, gordos, extranjeros, locales, todos son tópicos, que en un “consciente” cuadriculado, se encajan perfectamente en esos tópicos que hemos ejecutado en nuestro programa.
Por eso agradezco tanto a los libros por una sola razón especial: No es porque lo que digan sea todo cierto, ni falso, incluso hay absolutas confusiones de sus humanos autores, pero nos ayudan siempre a despertar esa verdad que duerme dentro de cada uno de nosotros… dentro de mí duerme toda la verdad sobre la existencia… solo dentro de mí.
Puedo llegar a ella a través de la meditación, del análisis, del silencio, de las lecturas, de lo que sea, lo que yo elija como más propicio; siempre que sencillamente desee seguir más allá de la respuesta.
Por eso siempre digo, que analizándonos internamente cada uno, puedo prometer que se llega a las mismas conclusiones que están ahí y allá escritas, porque toda esa información está dentro de nosotros, es como si un magnetismo emocional o una resonancia vibracional nos mantiene siempre conectados, no podemos estar de otra forma; de hecho, si consigues a alguien que logre estar desconectado, avísame que le capturaremos y le pondremos en una exposición como especie protegida, porque será el único ejemplar, digno de admiración por su falta de conocimiento de “sí mismo”.
Dentro de mi vive… lo que yo quiera…
Nos vemos en la luz ;-)
Jesús
