Desde que comencé el curso de Curación emocional dictado por Enric Corbera y Rafael Marañón, hubo un apartado especial que llamó muchísimo mi atención: El tema dedicado a las Glándulas Suprarenales.
Emocionalmente hablando, éstas tienen la función de darnos una dirección y un sentido a la vida, yo le añado, matemáticamente hablando, les llamo las glándulas vectoriales, porque ya sabemos que un vector tiene Magnitud, dirección y sentido...
Si en algún momento de nuestras vidas comenzamos a tener problemas con las suprarrenales, siempre lo primero es acudir a un médico, claro está, para preservar la vida, pero es muy interesante, incluso inteligente, encontrarle el sentido emocional que originó esa enfermedad, entiéndase "enfermedad" en mi criterio, lo que expliqué en mi post anterior: La curación.
Las Glándulas suprarrenales nos dan dirección en la vida, por eso si algo les sucede, es porque no sabemos a donde ir., no sabemos que decisión tomar, o no queremos hacerlo, o no sabemos que camino debemos seguir de ahora en adelante.
Si vemos el comportamiento animal, en documentales etc. , estos son unos maestros de biología, y en la misma biblia, y en nuestras mismas vidas, cuando un cordero se pierde del rebaño, lo primero que hace es quedarse en el sitio hasta que lo vengan a buscar, así mismo hacen los pastores con sus ovejas, incluso cuando éramos niños nuestros padres solían decirnos, "si te pierdes no vayas a ningún sitio, te quedas ahí hasta que te encontremos", y así en muchas más cosas en la vida.
Todo esto ocurre siempre a nivel inconsciente.
Cuando la oveja se sienta porque al ver que estaba pastando con muchas ganas, y levanta la vista y no ve al resto del rebaño, se sienta a esperar, esto sucede porque sus suprarrenales se han descodificado para que no se mueva, lo mismo pasa cuando nos perdemos de camino, nos quedamos un poco atontadosy solo nos queda fuerzas para preguntar a alguien ¿sabe dónde queda tal ....? todo esto ocurre, porque nuestro universo, nuestro inconsciente son perfectos, y nos dan una solución biológica a lo que en ese momento considera un conflicto, una solución de amor para salvarnos...
En mi experiencia personal, hace un par de semana s fuí al Ikea a aclarar algunas cosas de una compra que había hecho, como siempre que me subo a un autubús, calquiera que pille, me lleva a Plaça Espanya, por lo que dije , me subo en el primero que pase y ya está, porque tenía que hacer otras gestiones y me urgía llegar a Barcelona, y así lo hice, al mismo tiempo hablaba con mi esposa por teléfono, marco mi billete de transporte y me siento; justo en ese momento me doy cuenta de que el autobús se va por otra dirección, y le dije a mi esposa "Uy... me equivoqué de autobús", colgamos la llamada, para seguir hablando luego mientras que yo me ubicaba, las calles por donde se metía de verdad que no me eran del nada familiares, no las había visto nunca, lo que se me ocurrió fue bajarme cuando viera alguna parada de metro y de ahí salir rápidamente a donde iba, sin embargo me acordé de las glándulas suprarrenales, porque me quedé sentado, estaba perdido... fue cuando pensé en Un Curso de Milagros y dije: "Jefe, lo dejo en tus manos, llévame tu por favor..." , entregando esto al Universo, o al Espíritu santo, para que él dijese lo que tenía que hacer, y me quedé tan tranquilo, sentado viendo el camino.
Como a los 10 minutos de haber dicho esto, veo una calle conocida y digo, pido la parada ahora para bajarme por aquí, pero a pesar de haberla pedido, ahí no hacía parada el autobús, por lo que rodó un largo rato, no sé si 10 minutos más, y otra vez no sabía a donde me estaba llevando... al salir de esas calles tan largas, sorpresa, estaba a solo una calle del nuevo apartamento donde nos hemos mudado, en fin, que me trajeron a mi casa, sin transbordos como yo haría, y en mucho menos tiempo que lo que hacía normalmente... todo por haberlo dejado en sus manos, el sabe el mejor camino... ahora entiendo aquella frase "hágase tu voluntad..." porque su voluntad es nuestra máxima felicidad...
Gracias por haberme traído a casa, y gracias a mis suprarrenales por haberse descodificado y codificado en el momento oportuno... bueno, es que no puede ser de otra forma...
Un abrazo, los quiero mucho,
Nos seguimos viendo en la luz ;-)
Jesús
2 comentarios:
Me ha encantado tu escrito, y sabes... ha sido una manera muy clara para que lo comprendiera mejor, los ejemplos son grandes maestros.Un abracito
es fabuloso poder pasarle el balón a la cancha del Espíritu Santo, el mejor goleador, gracias compartirlo, mil gracias!
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